Parece que últimamente voy cumpliendo el reto de poder ver y disfrutar mis especies "totem". Aquellas que siempre me habían parecido exóticas e inalcanzables. La última, la avutarda (Otis tarda), el ser volador más pesado sobre el planeta, con hasta 17kg de peso. De carácter gregario, y hábitat estepario, en las llanuras parece más un "ungulado" que un ave dado su gran tamaño. Tanto visualmente como a nivel de nicho ecológico.
Primera visual del grupo de avutardas (Otis tarda) desde el desnivel. |
Recientemente tuve la oportunidad de ir a verlas en la zona de Murcia-Albacete. Al llegar donde siempre dormían, no encontramos más que huellas y plumas. Y ni los lugareños las habían visto aquella mañana. Todo apuntaba a que no íbamos a poder verlas. Hasta que un compañero las divisó a más de 2000 metros de distancia. Nos acercamos, y amparados por un desnivel del terreno, pudimos aproximarnos a unos 200m de ellas, distancia nada despreciable teniendo en cuenta lo asustadizas que son.
Grupo de avutardas volando |
Durante el resto del día estuvimos "detrás de ellas", esperándolas dentro de un hide, o desde kilómetros de distancia intuyendo dónde pararían la próxima vez que tomasen tierra. Al final, no volvimos a verlas debido a la gran cantidad de personas, vehículos y otros estímulos que les hacían levantar el vuelo constantemente aunque no nos hubiera dado tiempo ni a acercarnos. En una de las esperas en el hide, pude ver otra especie igualmente "inusual" para mí, sisones, 8 ejemplares que nos sobrevolaron a baja altura.
El mismo grupo desde 200m. |
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